En Duñabeitia, tu gestoría de confianza en Bilbao, sabemos que muchas veces puede ser algo tedioso emprender un negocio. Lo hagas de manera individual o con un socio, el mundo empresarial al principio es algo complicado: papeleos, burocracia, legalidades, terminología difícil. Por eso, hoy queremos ayudarte a entender la diferencia entre Sociedad Mercantil y Persona física, y qué te conviene más dependiendo de las circunstancias específicas del caso en el que te encuentres.
Diferencias principales entre Sociedad Mercantil y Persona Física
Para empezar, una sociedad mercantil es una entidad legal creada por dos o más personas con el fin de llevar a cabo actividades comerciales. Las sociedades mercantiles pueden ser de varios tipos, como por ejemplo, sociedades anónimas (SA), sociedades de responsabilidad limitada (SRL) o sociedades en comandita simple (SCS), entre otras.
La principal característica de una sociedad mercantil es que los socios comparten el capital, los beneficios y las pérdidas. Además, se establecen los roles y responsabilidades de cada socio en los estatutos de la empresa.
Por otro lado, una persona física es un individuo que actúa como persona natural en el mundo empresarial. Es decir, no existe una separación legal entre la persona y su negocio, lo que significa que el empresario asume todas las responsabilidades y riesgos de su actividad empresarial.
La principal diferencia entre una sociedad mercantil y una persona física es que en la primera existen varias personas que comparten la propiedad de la empresa y asumen las responsabilidades y riesgos de manera conjunta, mientras que en la segunda una sola persona es dueña de la empresa y asume todas las responsabilidades y riesgos de manera individual.
Otra diferencia importante es que las sociedades mercantiles tienen una estructura formalizada y regulada por la ley, lo que implica una serie de trámites y requisitos que deben cumplirse para su creación y funcionamiento. En cambio, una persona física puede iniciar su actividad empresarial de manera más sencilla y con menos formalidades legales.
En cuanto a la responsabilidad legal, en una sociedad mercantil los socios tienen una responsabilidad limitada al capital que han aportado, lo que significa que sus bienes personales no están en riesgo en caso de que la empresa tenga problemas financieros o legales. Como una persona física, la responsabilidad legal es ilimitada, lo que significa que sus bienes personales pueden estar en riesgo en caso de problemas financieros o legales en su negocio.
¿Qué opción te conviene más?
Como habrás podido ver por las diferencias que te hemos comentado, la elección entre una sociedad mercantil y una persona física dependerá de las circunstancias específicas de cada caso, incluyendo los objetivos comerciales, la estructura de propiedad, los requisitos legales y los riesgos y responsabilidades involucrados.
En general, las sociedades mercantiles son una buena opción para negocios que requieren de un capital importante, ya que permiten a los socios reunir recursos financieros y compartir los riesgos y beneficios de la actividad empresarial. Además, las sociedades mercantiles tienen personalidad jurídica propia, lo que significa que los socios no responden personalmente por las deudas y obligaciones de la empresa, sino que la responsabilidad se limita al capital que hayan aportado.
Por otro lado, las personas físicas son una buena opción para pequeños negocios o profesionales independientes que no requieren de un capital importante para su funcionamiento, y que están dispuestos a asumir el riesgo y la responsabilidad que conlleva su actividad. Así que si estás pensando en entrar en el maravilloso mundo empresarial, no dudes en contactarnos y te resolveremos todas las preguntas que tengas.